miércoles, marzo 28, 2007

Sin Título (debe tener pero aún no lo encuentro)


El día gris lo buscó y las nubes oscuras, cuidadosamente, fueron escudriñando cada lugar donde pudiera estar. Viajaron por todo el país tratando de encontrar alguna pista de él. Pero aún así no lo encontraban. Entonces el día gris se puso triste y vagó por montañas y valles sin rumbo fijo. Y así llegó al sur. Más al sur de donde pensó encontrarlo. Y una tarde, sin andar buscándolo lo encontró.

Las nubes grises entonces se desperdigaron por todo el cielo y el día gris se mostró aún más gris que de costumbre, y se desnudó ante el.

Y allí donde lo encontró, allí permaneció día y noche durante 72 horas para hacerle recodar las tarde de jueves o domingo, de lunes o miércoles cuando él se quedaba viendo cómo el día se iba oscureciendo a pleno mediodía en un país donde todos creen que solo hay sol y playa.

El día gris esperó ver las lágrimas que solía ver en sus ojos y el profundo gesto de depresión que le gustaba observar cuando estaba en el país del sol. Pero se cansó de esperar, porque lo único que se le ocurrió a él ante el día gris y las nubes oscuras, fue recordar que tenía un lápiz y un papel y escribió una historia en un cuaderno mientras veía llover.